-- Señora, esta carta precisa respuesta inmediata. Es de vuestra hermana.

GONERIL

[aparte] Por un lado, esto me gusta; mas, siendo ella viuda y estando allí Gloster, los sueños que me había forjado podrían caer sobre mi odiosa existencia. Por el otro, la noticia no es tan grave. -- [Al MENSAJERO] La leeré y contestaré.

Sale

ALBANY ¿Dónde estaba su hijo cuando le sacaron los ojos? MENSAJERO

Venía hacia aquí con mi señora.

ALBANY

Aquí no está.

MENSAJERO

No, mi señor. Me crucé con él cuando volvía. ALBANY

¿Sabe algo de esta iniquidad?

MENSAJERO

Sí, señor. El fue quien le delató, y salió de la casa para que el castigo tuviera el campo más libre.

ALBANY

Gloster, vivo para agradecerte el afecto que has mostrado al rey y para vengar tus ojos. -- Vamos, amigo; cuéntame todo lo que sepas.

Salen*

IV-3

Entran, con tambores y bandera, CORDELIA, CABALLEROS y soldados. CORDELIA

¡Ah, es él! Acaban de encontrarle, más loco que la mar enfurecida, cantandoa voz en grito, coronado de fumaria y de grama; bardana, cicuta, ortigas, cardamina, cizaña y toda mala hierba que crece con el trigo que nos nutre. -- Enviad una centuria; buscad entre la mies sin dejar un solo campo y traedle que le vea.

[Salen los soldados.] ¿Qué puede hacer la ciencia del hombre para devolverle la razón? Quien le cure, tendrá toda mi riqueza.

CABALLERO

Señora, hay un medio.

Nuestra nodriza natural es el reposo, y él lo necesita. Para provocarlo, hay muchas hierbas que tienen la virtud de cerrarle los ojos al dolor.

CORDELIA

Secretos benditos, ignorados remedios de la tierra, ¡brotad con mi llanto!

¡Socorred y sanad a un hombre bueno en su congoja! -- Buscad, buscadle, no sea que su indómito delirio malogre una vida que ya no puede regirse.

Entra un MENSAJERO. MENSAJERO

Señora, noticias. Las tropas británicas avanzan hacia aquí.

CORDELIA

Ya se sabía. Nuestro ejército está a la espera. -- ¡Ah, querido padre, tu causa es lo que me mueve!

Por eso el Rey de Francia se ha compadecido de mis lágrimas de súplica y tristeza. No me incita a las armas la vana ambición; sólo el amor y el derecho de mi anciano padre. ¡Ojalá le vea y oiga pronto!

Salen.

IV-4

Entran REGAN y [OSWALD, el] mayordomo.

REGAN

Pero, ¿están en marcha las tropas de mi cuñado? OSWALD

Sí, señora.

REGAN

¿Con él en persona?

OSWALD

Señora, tras muchos remilgos.

Vuestra hermana es mejor soldado.

REGAN

¿No habló con tu señor el Conde Edmond?

OSWALD

No, señora.

REGAN

¿Qué le dirá mi hermana en esa carta?

OSWALD

No sé, señora.

REGAN

Pues salió a toda prisa por algo importante. Después de sacarle los ojos a Gloster, fue una torpeza dejarle con vida.

Donde va, indispone a todos con nosotros.

Creo que Edmond, apenado por su suerte, salió para acabar con su negra existencia; y también a examinar las tropas enemigas.

OSWALD

Señora, tengo que ir tras él con esta carta.

REGAN

Nuestras fuerzas salen mañana. Quédate.

Hay peligro en los caminos.

OSWALD

Señora, no puedo. Mi señora me encareció la importancia de este asunto.

REGAN

¿Por qué le escribe a Edmond? ¿No podías llevarle su mensaje de palabra?

Tal vez… ciertas cosas no sé. Te querré bien: déjame que abra la carta.

OSWALD

Señora, preferiría…

REGAN

Sé que tu ama no quiere a su marido; estoy segura. Y, cuando hace poco estuvo aquí, dirigió al noble Edmond elocuentes miradas amorosas. Sé que eres su confidente.

OSWALD

¿Yo, señora?

REGAN

Yo sé lo que me digo. Lo eres; lo sé.

Por eso te aconsejo que prestes atención.

Mi esposo ha muerto. Edmond y yo lo hemos hablado y él conviene más a mi mano que a la de tu señora. Lo demás ya lo imaginas. Si le encuentras, dale esto, te lo ruego.

Y cuando tu señora sepa lo que te he dicho, pídele que se ponga en razón.

Y ahora, adiós. Por si fueses a encontrarte con el ciego traidor, habrá recompensa para quien le mate.

OSWALD

¡Ojalá diera con él, señora! Así se vería de qué lado estoy.

REGAN

Buena suerte.

Salen.

IV-5

Entran GLOSTER y EDGAR [vestido de labriego]. GLOSTER

¿Cuándo llegaremos a lo alto del monte?

EDGAR

Lo estamos subiendo. Mirad lo que cuesta.

GLOSTER

El terreno me parece llano.

EDGAR

Muy empinado.